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jueves, 30 de julio de 2020

CARRETILLERO

XVI.

Boris “El Mandingo” era un afrodescendiente que trabajaba trasladando en carretilla inmensos troncos extraídos del monte con destino al aserradero del pueblo. Su gigantesca humanidad sumada a una fuerza inmensurable, hacían que fuera temido por todos en la verde comarca. También era conocido por disfrutar de un enfermizo pasatiempo; en las noches fiesteras de fin de semana, cuando algún hombre que bebía demasiado y quedaba dormido en alguna callejuela, era secuestrado sobre la carretilla del Mandingo internándolo en el monte oscuro, donde era violado por el gigantón y abandonado a su suerte.

Una noche de esas el respetado médico del pueblo, festejando su onomástico, anduvo de cantina en cantina ebrio de felicidad hasta que perdió el conocimiento. Despertó en la carretilla de Boris “El Mandigo” quien lo trasladaba calmo entre la arboleda. Sorprendido el medico tratando de incorporarse le gritó asustado; “¡Negro! ¿Dónde me estas llevando?”. El fornido hombre le contesto con voz ronca e irónica; “No lo estoy llevando Doctor…ya lo estoy devolviendo”.


miércoles, 22 de julio de 2020

SORDOMUDOS

XV.
Mientras tomaba una cerveza en la barra, observaba como alegres sordomudos bebían botella tras botella al otro lado del bar. Entre señales y muecas se notaba que la pasaban muy bien. Su silencio no era una limitación para compartir hermanados suculento licor. Llegó la media noche y el cantinero me dijo que ya era hora de cerrar. Mientras apuraba la copa en largos sorbos, le pregunté si sabía alguna señal para indicarles a los sordomudos que dejaran la cantina, me miró sorprendido, sonrió malicioso y con  voz irónica dijo; “Simplemente apago la luz”. 

domingo, 19 de julio de 2020

IGNORANTE

XIV.

Le costó muchísimo aprender a leer. Como no tuvo la oportunidad de niño, ahora de mayor debía hacerlo para dar ejemplo a sus hijos. Orgulloso se graduó del C.E.M.A. con fiesta incluida, ya nadie jamás le diría ignorante. Empezó a leer lo que cayera en sus manos, crecieron tanto sus conocimientos que un día apenado se dijo a sí mismos que hubiera preferido quedarse ignorante.


martes, 14 de julio de 2020

NO ME SACARAN DE MI CASA

XIII.

No sé qué le pasa a ésta gente, quieren sacarme de mi casa al igual que la anterior familia. seguramente se enteraron que hay un tapado en el patio. Pero ese oro es de mis abuelos, no permitiré que me arrebaten lo que es mío. ¿Piensan que con latigazos, ofrendas, inciensos y oraciones me sacaran de acá?, aunque debo reconocer que ese curandero es bueno. Pero es mi hogar y nadie podrá sacarme de acá, aunque pasen otros doscientos años.”


domingo, 12 de julio de 2020

MATEN AL PRISIONERO DE GUERRA

XII.

Los Pilas lo encontraron malherido después de la sangrienta batalla. Logró salvar la vida con los pasos de los días. Empezó a trabajar recolectando fruta en la estancia de un nefasto general paraguayo. Esperaba con ansia retornar a su pueblo amado. Cuando se a notició del cese de hostilidades, rogó a Dios para que pronto sea liberado. Y fue así; el general debía entregar al estado boliviano el cuerpo de 100 soldados que cayeron muertos en la última refriega, y tenía en su custodia solamente a 99.   


jueves, 9 de julio de 2020

EL ÁRBOL DEL DUENDE

XI.

La anciana, antes de morir pidió a sus familiares que no cortaran el inmenso pino que había en el huerto. Solía decía que en aquel árbol habitaba un duende quien daba buena suerte a la familia. cuando llegó el momento de la división de la casa, el árbol se convirtió en un problema, por lo que decidieron talarlo. Después de unos meses la mala fortuna tocó la puerta de cada miembro de la familia. El Yatiri que consultaron les dijo que mientras no construyan un nuevo hogar para el duende seguiría habiendo desgracias. Como el patio de la casa divida fue enterrado en concreto, decidieron plantar un pino en la acera de la calle. Y la familia nunca pudo progresar.     


miércoles, 8 de julio de 2020

ATRACO DE DESPEDIDA

X.

Tenían que partir sin decir razones. Amarse no era suficiente. Los años no tuvieron el impacto de la costumbre.  Pese a que cada uno llevaba algo del otro, eliminaban los restantes con rencor. Siempre supieron que ese momento llegaría. Hicieron el último atraco, y con la muerte entre sus manos, partieron por caminos separados. 


DEUDA AJENA

IX.

El telegrama nunca llegó a su destino. El único administrativo que se quedó en las oficinas había enviado los informes económicos para que el dinero fuera desembolsado y llegara a tiempo desde la ciudad. En una semana era Noche Buena. Los mineros enfurecidos fueron a buscar al contador exigiendo su pago. El hombre explicó que el dinero ya debía haber llegado. En la empobrecida Noche Buena los mineros ebrios y desamparados allanaron las oficinas de la empresa, quemando todo lo que se hallaba en las oficinas. Con éste son 25 años que el contador sigue pagando esa deuda con la empresa.


FLORES EN UN MANTEL


VIII.

Sus pensamientos eran como las flores de un mantel. Hasta que llegó el invierno de la invención. La aguja no volvió a bordar el norte. Transcurrieron los años y sus escritos fueron amarilleando como hojas otoñales. Se dio cuenta que jamás volvería a crear nada más, por lo que decidió dejar éste mundo. Mientras saltaba al abismo pensó que nadie lo recordaría. Pero se equivocó, ahora todos rememoran al escritor suicida, que se desvaneció una tarde de primavera.


AL NATURAL

VII.

La princesa se fue de fiesta y él llegó como paracaidista minutos después. Anduvo detrás de ella desde que llegó, tratando de ocultar su ambición la invito a bailar insistentemente. Ella con unas copas demás accedió, le dijo que eso debía quedar entre los dos, prometieron que jamás nadie se enteraría. Salieron del club con dirección a su departamento, solo quería verla al natural. El desastre lo recogieron al día siguiente con fotografías que se pueden ver en Instagram.


MECÁNICA DE ÉSTOS TIEMPOS

VI. 

La suerte se coló por una ventana. Todo pasó tan rápido que pensó que ya había terminado. Cuando despertó de su desmayo estaba en una sala de hospital. Le dijeron que sanaría muy pronto. El automóvil quedó como un papel arrugado, pero lograron sacar su cuerpo por la ventana. Maldijo su suerte porque en verdad quería morir. Le echó la culpa a la mecánica de éstos tiempos.


UN LAPSUS

V.

Había encontrado la manera de sobrevivir. Su vida se recompuso cuando descubrió como era en verdad. Contrató un automóvil y le montó un parlante, fue por un lado y por otro llevando su mensaje. Durante mucho tiempo dio a conocer lo que crecía dentro suyo. Dijo sin vacilar lo que verdaderamente había en él para dar a los demás. Cuando le preguntaron por lo que no hay, fue cuando dejó de existir.


PRIMAVERA NO

IV.

Esas mariposas le habían dejado cicatrices en el vientre. Intentó curarse con magia, pero las calles, los discos, las nubes, los mensajes y las voces le recordaban a él. Pronto, fue tarde para retroceder, en su fuente jamás volverán a anidar mariposas. Por ese motivo odiaba la primavera.


DISTANCIA

III.

Tuvo que dejarlo todo para tenerla. Pero ella se fue marcando una dura distancia. Su corazón desecho tuvo que ser condenado a perdurar. Los días se tornaron en extremo largos. El viento se interponía entre el orgullo y la desesperación, entre el hogar y el vagar. Nunca tuvo un sitio donde regresar.


FELICES FOREVER

II.

Despertó con la fragancia a café. El ruido de la ciudad tocó la ventana como un día cualquiera. La perfección de las notas en el estéreo hizo que la abrazara. Ella contenta empezó a bailar y cantar. El primer día del resto de sus vidas. Sonrieron alegres, ambos sabían que la separación era inevitable.


LOCURA

I.

Envió dos palomas mensajeras. Escribió los mensajes en un papel de golosina que encontró tirado en la calle. La primera estaba destinada a volar donde su amada y llevaba escrito que pronto partiría. La segunda debía encontrarlo a él cuando se perdiera en la demencia. Después de mucho tiempo llegó la respuesta añorada y en papel decía: te apagas tú me apago yo.